Mi esposo se burla de mí porque dice que me gusta ver unos canales en televisión que aunque muestra series y películas relativamente nuevas, parecen de los años 80.

Debo darle la razón. En uno de esos, hace unos meses, estaban pasando esta película y por la calidad de la imagen tal vez y a pesar de ser de comida, la descarté de una. Ni le di la oportunidad.

Hoy, escarbando otra vez en la lista de Moviecity play, me tope con ella. Dudosa le puse play y me enganchó.

En resumen, es sobre una mujer estadounidense que se va para Japón detrás de un amor y termina convirtiéndose en aprendiz de Ramen.

El Ramen es uno de los platos más populares de la cultura nipona y como aprendí en esta película, una preparación cargada de sabiduría, aprendizaje, esfuerzo y alma.

Sin entrar en detalles sobre la actuación o el guión, queda un sabor que me gusta. Aunque en la cocina se domine la técnica a la perfección, si no se le pone amor, resulta insípida.