A veces las cosas más sencillas resultan ser las más increíbles. Hoy lo comprobé con el maravilloso almuerzo que preparé.

Como estamos en el mes de la pasta en Lo que se cocina en esta casa, saqué mi paquete de Ravioles de carne Doria y me pregunté: ¿con qué los acompaño?

Los raviolis son una pasta más elaborada que las demás, al ser rellena, no necesita salsas pesadas ni llenas de ingredientes. Por el contrario, deben ser sencillas.

Tenía a la mano un manojo de perejil fresco, unos ajos, aceite de oliva que nunca falta en mi cocina y una bolsa de maní que me regaló mi amiga Tita.

Los ingredientes perfectos para improvisar un pesto básico ( a mi manera claro está).

Mientras escribo esta receta voy comiendo el resultado y la verdad quedó tan rico que me siento orgullosa.

Lo mejor es que es una receta para compartir los fines de semana que no toma más de 20 minutos.

¿Qué necesitas?

Para 2 porciones grandes

1 paquete de ravioles de carne Doria de 250 g

1 taza de perejil

2 ajos pelados

¾ de taza de aceite de oliva

3 cucharadas de maní

sal y pimienta al gusto

Preparación

Pon a calentar 2 litros de agua en una olla grande. Cuando esté hirviendo añade los raviolis y deja cocinar durante 17-20 minutos.

Escurre la pasta y déjala en la olla.

En la licuadora prepara la salsa mezclando el perejil, los ajos enteros, el maní, el aceite de oliva, la sal y la pmienta. Mezcla bien y agrega la salsa a los raviolis calientes.

Sirve con queso parmesano o como hice yo hoy, con cubitos de mozzarella por encima.

No te vas a arrepentir.

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